domingo, 5 de julio de 2015

ALGUNAS DIFERENCIAS ENTRE SEXOS



¿Buscamos cada vez más las emociones fuertes e intensas?

Heidy Natalia Orozco García

Hoy todo es más efímero e inmediato. Tal vez por eso, en las nuevas relaciones de pareja, se tienda más que nunca a la búsqueda de emociones cada vez más fuertes e intensas, con el fin de evitar la rutina o caer en un juego tedioso, monótono y cotidiano. Dicen que el aburrimiento es lo más “antierótico” en una relación. Y la creatividad es esencial para que la relación de pareja sea más perdurable.

La nueva mujer está a la altura con el concepto que aplica Anthony Giddens del "hombre inmediato". Y hay nuevas demandas y nuevas ansiedades que, sino  saciar, por lo menos -calmar cuanto antes.  

Luego, ambos buscan saciar sus emociones en la inmediatez. Hacer realidad sus pasiones sin valorar las consecuencias a más largo plazo, pero ¿es el hombre el que menos reflexiona sobre las posibles consecuencias de las transgresiones? ¿Ellas más emocionales, siguen teniendo miedo a transgredir las reglas? Vamos, más cerebrales. “Se retraen, pero una vez iniciadas, remontan las aguas bravas” (alguien decía). Ahí de -virtuosas o disolutas, y una vez implicadas en el juego, de divinas pueden convertirse en  diabólicas. Como refleja nuestra  viñeta (Autora:Natalia Orozco. Diseñadora Gráfica).

¿Existen diferencias entre hombres y mujeres en esto de entregarse? ¿Les cuesta más a las mujeres separar lo genital del corazón?
Sí puede, o depende en qué circunstancias, pero, una vez que surja el estallido pulsional, se entregan con mayor pasión. La nueva mujer emancipada, liberada de la condena reproductiva según la “hipótesis represiva” de la que habla Michel Foucault.

En el hombre, una vez iniciado el juego, se retrae más por miedo al compromiso y a su implicación emocional. ¿Individualismo, narcisismo en ambos sexos? El hedonismo es un imperativo en este cambio social y relacional.

Luego, ¿los límites en el grado de implicación, son diferentes para cada sexo?
Una cita de Rodríguez Rust: “Las personas se pueden sentir atraídas sexualmente por personas con las que nunca consentirían tener relaciones sexuales, y pueden imaginar amores con personas a quienes ni siquiera conocen y ni quieren conocer”.

 Pienso que esto es más propio de las mujeres. Ellas valoran más si el hombre está comprometido o tiene su pareja. Según algunos estudios realizados, y perdón que no los cite, afirman que ellas no siempre ven al hombre como un posible objetivo de conquista, mientras que ellos nunca lo descartan.

Pero esto de buscar las diferencias hombre-mujer así tan universales y válido para ambos sexos, no deja de ser un error garrafal. Todos tenemos parte de ambos sexos, pero la sociedad en muchos casos no admite ambigüedades.
Por eso y siguiendo a Elisabeth Badinter, “existe un nuevo modelo de hombre reconciliado”. Un concepto nuevo para definir a un hombre actual que sabe aceptar sin miedos la parte femenina que lleva dentro y es capaz de buscar el equilibrio como hombre.

Si ellas se implican más emocionalmente, también es cierto que muchos hombres, tras haber conseguido su propósito, desaparece de la escena, se difumina ¿será por miedo a implicarse, miedo o espanto al compromiso?
En definitiva, esto es cuestión de madurez. Dentro de cada uno, sea hombre o mujer, cohabitan los dos modos de ser, de sentir, de amar. La madurez llega cuando aprendemos a amar sin esperar nada a cambio. Acabo con una cita: "Me aman porque yo también amo"(Erich Fromm).



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